Los malos hábitos alimentarios son la causa de multitud de dolencias y enfermedades que acaban limitando tanto nuestro bienestar como nuestro tiempo en vida. La separación del hombre de la naturaleza ha facilitado que nuestra dieta, por lo general, haya sufrido una degeneración importante. Todo ello comenzó cuando ser humano empezó a basar su dieta principalmente en la carne.
A causa de la degeneración dietética producida, sobre todo en el mundo occidental, nuestra dieta se compone principalmente de alimentos refinados, desnaturalizados y excesivamente cocinados. Cada vez, con mayor frecuencia, nos llegan noticias e información que alertan de la necesidad de un cambio significativo en cuanto a los alimentos que conforman nuestros hábitos alimentarios.
Son miles de personas por todo el mundo, las que a diario incorporan la planificación de este cambio de alimentación en su día a día.
Sin embargo, modificar hábitos, al ser humano es algo que le cuesta, sobre todo cuando no tenemos claro cómo proceder para conseguirlo. De hecho, infinidad de personas han fracasado en sus esfuerzos por adelgazar y mantener en el tiempo, dietas consideradas como saludables. Esto puede servirnos para dejar patente, que detrás del abandono de una dieta se hallan algunos factores ocultos que nada tienen que ver con la ilusión puesta por el individuo en incorporar hábitos más saludables a su vida, ni con la efectividad de la dieta que pretendían seguir.
Un sentimiento de culpabilidad por parte del implicado o implicada así como de su nutricionista, casi en la totalidad de las veces carecería de sentido, si se desconocen los aspectos que impiden lograr un objetivo de tan considerado calibre, como puede ser el cambio de hábitos alimentarios de una persona. Quienes han conseguido liberar sus vidas de malos hábitos como pueden ser una inadecuada alimentación, el abuso del alcohol o del tabaco, por ejemplo, deben sentirse afortunados al haber acertado con alguna de las posibles maneras de hacerlo.
Evidentemente, no todos los individuos, funcionamos física y mentalmente de la misma manera. En contraposición, la realidad y nivel de frustración de otras personas se presenta bastante diferente. Es este colectivo decepcionado, el que más preocupa a aquellos y aquellas profesionales que conocemos mecanismos, estrategias o métodos, que pueden facilitarles el tomar las riendas de sus vidas con el objetivo de mejorar su salud y bienestar.
El Coach, un profesional enfocado en implementar metodologías que ayudan a mejorar cualquiera de los ámbitos del ser humano, se presenta como una factible posibilidad de logro para quienes llevan tiempo intentando infructuosamente, seguir las pautas y el mantenimiento definitivo de una dieta adecuada.
A través de un proceso de Coaching podrás reflexionar sobre las causas reales que te mantienen en esa situación, y afrontarlas con la conciencia necesaria para superarlas. Además, tu Coach retará tus capacidades para que rindas al máximo en este periodo en el que tu creciente sensación de logro y la supervisión de un profesional, serán los fundamentos que te permitirán mejorar tu estado físico y mental.
Los objetivos que carecen del plan adecuado para conseguirlos, a menudo se convierten en simples deseos. No permitas que tu salud, tan solo sea eso…, una ilusión.
¡Pon un Coach en tu vida!
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